Con su elegancia y caminar gracil a nadie se le hubiera ocurrido sospechar de este Hanibal Lecter de pacotilla.
Cuando el hambre apretaba entraba en las casas,no habia balcón que se le resistiera.
Todas las victimas tenian algo en comun,un sentimiento de culpa que atormentaban sus vidas.
Eso les generaba insomnio,pero el sueño siempre acaba venciendo...
Momento que aprovechaba para abrir sus bocas y de un certero bocado arrancarles de cuajo la lengua.
¡Miauuuu! ¿Quién te lo iba a decir?-Te la comió el gato.
Comentarios
Cuando el deber le llama entra en casa ajena,no hay balcón que se resista.
Todas las victimas tienen algo en común,un sentimiento de culpa que atormentan sus noches.Ese punto agrio le encanta.
Suelen sufrir insomnio,pero el sueño siempre acaba venciendo...
Momento que aprovecha para abrir sus bocas y de un certero bocado arrancarles de cuajo la lengua.
¡Miauuuu! ¿Quién lo hubiera imaginado?-Te la comió el gato.