Bueno, el problema que tengo es que quiero dedicar este poema a una "amiga", pero no encuentro como hacer interesante el poema, ojala me ayuden, de todas formas gracias, el poema es el siguiente:
Perdámonos pensando paraísos prefectos
abandonemos la cordura, volvámonos poéticos
esperemos en la canícula del silencio
alimentémonos sobre arboles delirantes
soñemos que la lluvia nos difuminó
respiremos noches envueltas en dedos nocturnos
y viajar hasta perdernos
La cuestión es: tengo una metáfora para el primer verso:"Perdámonos pensando"podría ser(Isla virgen o algún sitio de perdición) "paraísos prefectos" una comparación con el paraíso perfecto, para mí seria: (algún lugar endulzado y extasiado), quedaría algo así: "Varados en la isla virgen, viviente, endulzada y extasiada", o "escóndete mientras me alejo" pensado paraísos perfectos, ó perdámonos pensando "lugares endulzados y extasiados", ¡Necesito ayuda!
También tengo otro verso, pero no se donde ponerlo, a ver si alguien se le ocurre: Olvidémonos "como el alejamiento de la cartera del dueño", que estúpida metáfora esta última, jejeje, también ayuda.
No es necesario que hagan todo el poema, con que me ayuden en un verso, con una metáfora me sentiría agradecido.
Comentarios
Ahora toca desarrollarlo hasta las 6 de la mañana sin dormir.
Un día y otro día, y dos semanas o cinco años.
Si relacionáramos pintura con poesía, el pintor Antonio López te podría explicar gustosamente el tiempo que tarda en pintar un cuadro.
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Yo no le encuentro mal a la invitación de perderse en un paraíso perfecto, es como una afirmación de que no existen. El paraiso perfecto fue antes de la serpiente y la manzana, y ... Que aburrido debió haber sido aquello.
"Alimentémonos sobre arboles delirantes" no me gusta, suena a imagen falsa, forzada, creo que seria mejor cambiarlo.
abandonemos la cordura, volvámonos poéticos... Esto esta genial.
Saludos, Abril
Tomemos LSD para crearnos paraísos sinestéticos,
despojándonos de la cordura, creando ilusiones encapsuladas,
esperando en la canícula del silencio
las figuras de árboles delirantes
respirando la lluvia difuminarse
saboreando noches envueltas en nuestros dedos
viajaremos hasta encontrarnos
esta noche
Saludos
Te entrego mi dedil, una punta de dedo:
Cacharel, brote halado, que cintila en tu boca,
Blanco carmesí, sinalefa sintética.
Se deshace un haz de luz ¿o es un ángel alado,
Metabolizándose en ti, a ritmo frenético?
Farfullas, somos dos, buganvillas nocturnas,
O peces en la mar, resbalando en la sal.
Y en un ápice todo temes… pretendes perderte.
Te imploro
<<No me dejes. No te vayas sin mí.
Sigamos siendo centro, viajemos, tan lejos…
Muy lejos de aquí>>.
el cuerpo del poema?
Esta tarde a la 17:00,
donde siempre.
Avisa que volverás
tarde.»
Trata de llegar al fondo de lo que quieres decir, como si lo concibieras por primera vez y luego trata de buscar la expresión precisa para hacerlo llegar cuando no se han inventado las palabras específicas para eso.
Si no partes de un ejercicio de honestidad, la poesía es hueca y se nota.
¿Porque querer representar lo que no se es?
Espero que al menos te halla dado la pasada... jajaja