¡Bienvenido/a!

Pareces nuevo por aquí. Si quieres participar, ¡pulsa uno de estos botones!

Un retorno inesperado

LowenaLowena Pedro Abad s.XII
editado septiembre 2015 en Romántica
Un retorno inesperado

Hace muchos años ya que recurrí a mi gran amigo El Mar en busca de respuestas que me ayuden a resolver ese gran rompecabezas que se ha formado en mi interior. Siete largos años en los que la felicidad ha sido el mayor protagonista, pero de nuevo, una oscuridad se ha adueñado de mí.

Camino por la orilla de mi playa donde tantas horas pasé en compañía del que se convirtió en el pilar de mi vida. Mi querido amigo, mi consejero, mi mentor. Reconozco que uno de nuestros amigos en común, El Tiempo, se ha apoderado de mi percepción, ya que parece una eternidad desde la última vez que nos vimos. No he dejado de conversarte en la distancia, deseando que me oyeras y que aparecieras en medio de la nada para apaciguar mi locura. Demasiadas cosas albergo en mi interior que me consumen y me matan por dentro. Dame una respuesta que justifique este sufrimiento por favor. Siento que ya no me quedan fueras para seguir.

Una ola emerge del mar en calma y aparece el rostro de mi amigo que tanto he añorado.

- Hola mi pequeña, aunque por lo que he escuchado, ya no eres tan pequeña.

– Me dice con una sonrisa nostálgica como si de repente hubiésemos viajado tiempo atrás.

- No te burles de un alma atormentada como la mía. Sabes que soy muy susceptible. – Le digo con un amago de sonrisa.

- Eres la niña de mis ojos Lowena, no lo olvides nunca. Pase lo que pase, siempre me tendrás, eso no lo dudes jamás.

Una lágrima en pleno acto de libertinaje se desliza por mi mejilla, camuflada por una sonrisa de gratitud infinita.

- Sólo tú me haces sonreír cuando lo único que quiero es llorar hasta vaciarme por dentro, He tardado demasiado tiempo en venir, lo siento.

- Querida, no he dejado de escuchar cada una de tus conversaciones conmigo en la distancia. Siempre te tengo presente y aunque no haya estado ahí para aliviar tu dolor, soy consciente de tus tormentos. Y déjame que te diga que nada consigues cuestionándote cada segundo que pasa, castigándote por errores que no has cometido tú, culpándote por no ser lo suficientemente buena, sufriendo por un sentimiento de culpa que no te corresponde. Tú vales mucho y eres muy especial. No dejes nuca que alguien te haga sentir pequeña e insignificante. Tienes un corazón de oro que sólo se merece si se lo ganan. Y ese es un juego en el que hay que apostar día a día. No vale con ganar una vez y creer que será suyo para el resto de su vida. Es algo vital que nos mantiene cuerdos y vivos, y sólo cuando lo perdemos es que creemos enloquecer y morir lentamente.

- Bonita definición de lo que se siente al morir por amor. - Cerré los ojos y dejé que el olor me embriagara produciendo un efecto calmante que ni el más elaborado "cigarrillo" podría proporcionar.

- Es la definición de lo que pasa cuando perdemos la fe en nosotros mismos y creemos que no somos merecedores de lo mejor, provocando nuestra autodestrucción, querida. No confundas el amor de un prójimo con el amor propio. Primero tenemos que saber querernos a nosotros mismos para enseñarles a los demás cómo nos merecemos que nos quieran. Y por muy egocéntrico que suene, es la más pura de las verdades.

No puedo evitar sonreír y llorar a moco tendido. Sólo Él consigue que ría y llore a la vez. Una cualidad que lo hace tanto especial como único.

- Jamás dejarás de sorprenderme. Cómo es posible que siempre tengas la respuesta adecuada en el momento adecuado. Admiro esa capacidad tuya de ver siempre una luz, un lado positivo cuando la oscuridad y la desesperación se han proclamado ganadoras del combate.

- Mi niña, he de recordarte que no eres la única que sufre por amor. ¿O es que acaso ya no recuerdas la eterna lucha del Sol y La Luna? ¿Existirá un amor más imposible que ese en el Universo? Yo creo que no.

- Cierto, lo recuerdo. Pero eso no me consuela. No resuelve mis problemas. ¿Cómo hallo consuelo en algo con lo que no me siento identificada?

- Porque la cosa no consiste en hallar una similitud niña, sino en aprender y entender que por muy difícil que sea, por muy imposible que parezca, el querer y las ganas, siempre prevalecerán. Encuentra algo que te motive a luchar por aquello que amas, ya sea amor por ti misma o por amor a él, y tu lucha volverá a tener sentido. No puedo decidir por ti, ni decirte cómo debes actuar, pero estoy convencido de que hallarás las fuerzas que ahora te faltan y tomarás el camino correcto.

Y dicho esto, la ola se sumerge devolviendo la calma a la orilla de la playa, y dejándome sola en mi propio mar de dudas, pero con la sensación de haber encontrado ese rayo de luz que me devolverá a la normalidad. O eso espero.



* Hace tiempo que no registro una entrada. Como bien le he comentado a mi gran amigo El Mar, hace tiempo que no nos sentábamos a charlar. Para todos aquellos que a lo mejor no entiendan la relación entre El Mar y Lowena, digamos que es una continuación de los minirelatos de "¿Te cuento un secreto?", donde Lowena intenta resolver sus problemas charlando con sus "amigos especiales".

Un saludo y espero que os guste!

Comentarios

  • amparo bonillaamparo bonilla Bibliotecari@
    editado septiembre 2015
    Hola, re-bienvenida, esperamos que tus charlas con el mar sean más frecuentes:)
  • LowenaLowena Pedro Abad s.XII
    editado septiembre 2015
    Muchas gracias ^^. Tengo la sensación de que sí que habrán más charlas jeje. En esta ocasión, sólo hemos puesto el problema sobre la mesa. Ahora toca estudiarlo y resolverlo ;)
Accede o Regístrate para comentar.


Para entrar en contacto con nosotros escríbenos a informa (arroba) forodeliteratura.com