Hace algunos años me encontré con un escritor novel (todavía sigue de albañil y sin publicar), que me decía que no le preocupaba lo más mínimo lo que pensara el lector, cuan in entendible fueran sus relatos y ese tipo de cosas.
Bien.
Cuando nos sentamos frente a una de esas irreverentes hojas en blanco que tanto conocemos, tenemos claro que queremos escribir. La mayoría de veces incluso llevamos en mente la historia que queremos comenzar a escribir.
Pero...
¿Pensamos e algún momento a quien nos quereos dirigir?
¿Sabemos o percibimos que palabras quieren leer nuestros lectores?
Estos y otros aspectos por el estilo, quizá sean de los más importantes si queremos que salga a la luz nuestra obra, y casi siempre, se denota su carencia en la mayoría de los textos.
Teniendo en cuenta que somos fabricantes de sueños, de verdades y mentiras, fabricantes de puertas donde las personas que se atreven a abrirlas, se introducen en nuestro mundo o bien vienen a formar parte de el...
Dicen que todos los chinos fabrican relojes...
Antes de fabricarlos hay que estudiar que tipo de reloj se quiere fabricar e intentar ajustar ese mecanismo y ese diseño a quien vaya dirigido.
Comentarios
Algún día compartiré con el mundo, pero sé que al escribir no estuve pensando en complacer a nadie.
Si la literatura se tratara de complacer...
Cuando yo escribo, en lo único que pienso es en construir una historia bonita, amena, entretenida y que aporte algo de mí, no pienso en quién lo leerá, simplemente presumo que, al igual que me gusta a mí, puede que guste a los demás.
No creo que sea malo el no pensar en un tipo de lectores determinado, al contrario, siempre creo que mis novelas son para un amplio público que lo que desea es entretenerse, pasar el tiempo y disfrutar de la lectura..., eso me concede un amplio número de lectores potenciales y sobre todo, no limita mi imaginación ni me siento embutido en un corsé que no me deje respirar..., si fuera así, no sería algo con lo que disfrutara.
Puedo llegar a creer, que cuando eres un autor consagrado tengas que cuidar un estilo, una imagen y a unos lectores en concreto, o ceñirte a algun tipo de directrices, sin embargo eso puede llegar a limitar la capacidad creativa del autor. Esa limitación, anula la espontaneadad del literato, encasillándolo y etiquetándolo... Es como ciertos actores de cine, los cuales todos tenemos clasificados en algún que otro estilo, ya sea aventuras, dramático, cómico, etc., sin embargo, ese encasillamiento le impide desarrollarse en otros aspectos. Creo que todo huimos de las etiquetas, aunque finalmente, y de forma irremediable, se nos conozca (llegado el caso), en un estilo concreto.
Creo que somos los lectores los que debemos descubrir, interpretar la obra.., buscar que nos ha querido decir..., puesto que entiendo que en un libro esta el sentir, la constancia, la historia, la imaginación, las vivencias y experiencias de ese que nos escribe.
A mi me gustaria o me gusta leer a aquel que escribe para el- mismo no para los demás...y al publicar esos textos pueda difundir su sabiduria...ya que los lectores estamos para eso ...para aprender de los libros.
un abrazo,
Necesitaba fluidez, mayor realidad en mis construcciones.
Pasé algunos meses en un taller de escritura. Me enseñaron mucho en ese tiempo, (yo era un saco vacío muy fácil de llenar) me enseñaron a mirar.
¿Pensamos e algún momento a quien nos quereos dirigir?
¿Sabemos o percibimos que palabras quieren leer nuestros lectores?
Estos y otros aspectos por el estilo, quizá sean de los más importantes si queremos que salga a la luz nuestra obra, y casi siempre, se denota su carencia en la mayoría de los textos
Para saber qué palabras quieren leer nuestros lectores, creo que debemos prestar más atención a las construcciones actuales. Creo que si uno de nosotros tuviese la posibilidad de viajar en el tiempo, digamos, al renacimiento, y alguien nos pidiese que pintáramos un cuadro, nadie se atrevería a pintarlo mediante trazos impresionistas. Y ahí está la clave.
Dependiendo a quien te quieras dirigir, así deberás equilibrar la balanza imaginaria (imaginaria en cuanto a equilibrio real) entre lo que sientes y deseas, y la importancia que le des a la venta.
Un saludo
En mi caso lo hago por defecto por mi formación en marketing, pero si se quiere publicar, hay que plantearse unas preguntas:
- En qué género vamos a encajar nuestra obra (o en cual nos la van a encajar)?
- Qué público potencial tenemos?
- De qué manera podemos optar a ampliar el espectro de público potencial?
- De qué forma el libro puede llegar a más clientes potenciales?
- Cómo debo orientar la portada?
- Y el título?
- Qué críticas nos va a dar el ir por un camino o formato?
- Qué opinaría un editor del manuscrito?
- ¿Cómo va de ritmo?
- etc
saludos
santi
Sin embargo sin opiniones enfrentadas, no existiría debate, asi que voy a por tí colega.
En cuanto al género o la clasificación de la novela... Amigo Santi, yo no podría escribir un ensayo, una novela romántica, una costumbrista, social, gótica, etc., mi estilo es parte de mí y no puedo escribir una obra que no salga realmente de mis entrañas.
En cuanto al público (los lectores ya aconsejan al editor sobre a qué público va dirigida la obra), el autor, simplemente plasma en la novela su potencial creativo. (salvo personas que se clasifican en algo determinado, como cuentos infantiles, sonrisa vertical, y un largo etc. que ya tienen un público específico, el resto lo hacemos sin pensar en él, es a posteriori cuando, una vez haz publicado, puede que tomes consciencia de hacia y para quien escribes, pero no debería ser ningún condicionante.
Para ampliar el número de lectores, lo que nos toca es publicar, y luego mejorar, mejorar y mejorar, aprender e intentar hacer cada vez más atrativa tu obra.
Con respecto a la portada. Para eso están los creativos, el autor, asi como el lector, podrán realizar indicaciones, pero al final es el artista o el creativo..., ellos ya conocen su trabajo.
En lo referente al título, igualmente opino que mis títulos son válidos, sin embargo, estaría a los consejos del editor o de su equipo de márketing para que en todo caso resultara más atractivo.
En cuanto a las críticas..., ojalá tuviera una bola de cristal, pero no pienso en ellas, simplemente escribo.
Qué opinaría un editor. Amigo Santi, sabes mejor que yo que todos estamos enamorados de nuestras obras, son nuestros hijos que cuidamos y mimamos. Lo que opine un editor es sencillo, si te la quiere publicar su opinión es favorable, de lo contrario, ya conoces la respuesta. Otra cosa es que el editor o el corrector intenten que cambies algun aspecto de la novela, para hacerla mas atractiva (que deberíamos discutirlo con calma)
En cuanto al ritmo de la misma... buf, depende. pero sobre eso hay mucha literatura. La primera persona imprime mayor ritmo, la segunda, relentiza el ritmo por diferentes motivos, pensamientos, descripciones del narrador y un largo etc. (no lo digo yo, lo dicen los expectos lectores y demás)
Bueno..., no me lo tengas en cuenta, no sea que me vuelvas a enviar a tus HDN... jejeje.
En primer lugar, autor consagrado... De crío aprendí el catecismo a base de hostias (que no eran de pan) de un cura un poco pallá, así que en ese sentido sí que has acertado.
es cierto que los autores protegemos nuestras obras como si fueran nuestros hijos, pero a la hora de publicar hay que pasarlas por un filtro, o quizás comenzar con esas premisas. Sólo es un consejo, pero creo que no es malo. Falquián tiene mucho que aportar en esta cuestión.
es importante que pienses qué público te va a leer, puesto que puedes escribir con otro enfoque y te puede ayudar a enriquecer tu obra. Lo del género o formato iba por plantearte cosas que ayuden a que tu libro llegue a más gente, no de que escribas ensayos o poesía. ya te lo explicaré en privado (junto con mis chicos, je,je).
lo de la portada tienes razón, hablo por defecto porque yo también soy diseñador, sin embargo aunque no la hagas tú, sí puedes contribuir con ideas o transmitir al diseñador tu mensaje para que sepa por donde ir. no es ninguna tontería. A mí me han hecho mucho caso.
para publicar y pasar el filtro de un editor hay que meter mucho de tu talento en el primer capítulo y en el último, porque es lo primero que miran. esto es muy importante. Que me corrija el amigo Falquián si me equivoco.
el corrector no te suele querer cambiar nada. tan solo te propone que aclares cosas que no entiende, etc. Esto se debería hacer de antemano con personas de confianza, amigos, ets que te destripen a conciencia el libro para evitar que luego lo hagan críticas destructivas.
Son solo unos consejos de este humilde escritorcillo de todo a cien.
un abrazo
santi
No sé si os estáis dando cuenta... Estáis hablando de literatura.
Creo.
Un saludo,
Catulo.
Santi, lo mío es simplemente llevar la contraria, que si no me aburro.
Estoy de acuerdo en mucho de lo que has dicho, pues denota una mayor profesionalidad, que nos falta al resto, por lo menos a mí. (no quiero generalizar para no herir sensibilidades).
En fin..., esperemos que se anime más gente a participar, porque el debate en sí es interesante.
Literatura:
Arte que emplea como medio de expresión una lengua.
Arte:
Manifestación de la actividad humana mediante la cual se expresa una visión personal y desinteresada que interpreta lo real o imaginado con recursos plásticos, lingüísticos o sonoros.
Catulo, lo tuyo sería lo más parecido a una novela por encargo, es decir, algo premeditado y que se ajuste a unas lineas impuestas, en este caso por el mercado (lectores), así pués, como decía yo anteriormente, entiendo que estarás preso en un corsé.
Entiendo que de esa forma se limita esa manifestación espontánea (que podríamos decir arte), aunque sigas empleando como medio de expresión la lengua, y la llamemos literatura.
bueno, y ahora si os dejo, que me voy a currar.
Pues mira, yo, para variar, estoy con Amando, ea, y me enfrento de lleno a Santi (pero ya volveré a por ti, Amando, tú dame tiempo...).
Uno escribe PARA SÍ MISMO, es decir, si no disfrutásemos como posesos con lo que escribimos, ¿para qué? Eso no quiere decir que intentemos retocar nuestra obra acorde con nuestro supuesto público. Esto no es ningún disparate, una de las habilidades que los niños han de aprender a la hora de escribir es ponerse en el lugar del lector, porque la escritura es COMUNICACIÓN, sobre todas las cosas, y no solo un ejercicio de autocomplacencia.
Ahora bien, no estoy en absoluto de acuerdo con la actitud mercachifle de Santi :rolleyes: (qué fino he sido, ¿a que sí?). Lo que dice hay que tenerlo cuenta si queremos aspirar a publicar, pero eso no debe ser la respuesta a los planteamientos genéricos de este post.
Si uno escribe para ganarse a un determinado público, no está siendo él mismo, se está vendiendo, empobreciéndose, y tenemos a toda esa música ultracomercial como símil válido.
La de Santi es el camino rápido, que no fácil, porque para hacer lo que él dice y hacerlo bien, hace falta un don. Es la vía “profesional”, y que no se tome como peyorativo, sino todo lo contrario, y que te lleva a publicar a mayor velocidad. Santi es la prueba.
La de Amando, que creo es la de la mayoría de los que empiezan, entre los que me incluyo, sería el largo y tortuoso camino (qué bonita canción, por cierto). Porque, además de hacerlo bien, tienes que acertar en la diana, sin proponértelo y con una venda en los ojos.
Yo ahora estoy viviendo las dos. Cuando escribo artículos de prensa, son para consumo inmediato, nacen y mueren en un día y tengo que dejar al lector satisfecho de lo que leyó aunque no comulgue con la opinión del artículo, así que, si bien lo escribo desde mi punto de vista, también lo escribo pensando en no aburrir a un lector que tiene mucho donde elegir en el periódico. Es un reto.
En cuanto a novela, si tienes que hacer caso a los lectores profesionales te puedes volver tarumba. Yo ahora mismo tengo informes de lectura variopintos. Sobre el estilo narrativo, estructura, etc… nadie me objeta nada. Es más, me dan palmaditas en la espalda. Pero en cuanto al argumento ¡ja! Tengo para escribir 2 o 3 novelas diferentes. A una le cae bien la familia pobre, y se enfada porque no tiene más protagonismo, a otra le seduce la parte de la guerra civil y me reprocha que no dedico más páginas a relatar la crudeza de esos días; otra se ha enamorado de uno de los personajes y me reprocha que desaparezca… En fin, podría escribir más de 20 líneas con sugerencias sobre cambios en la línea argumental. Y cómo resumen, me dicen que no cumplo los requisitos que Santi apunta, mi tema no está de moda, no es de los géneros que se oyen a todas horas, y eso es un problema ¿Qué hago? ¿Le meto un elfo en un campanario? ¿A qué “lector” satisfago? Al final tienes que tener tu propia idea, tener en cuenta las sugerencias que te hacen en cuanto a mejorar aspectos concretos, pero el resto es muy personal, y nunca gustará a todos. Llevará tiempo, pero creo, confío, en que algún día verá la luz.
Dices que escribes artículos de prensa. ¿Dónde publicas?
Respecto al tema en cuestión habría que diferenciar dos categorías. Por un lado el escritor novel, aficionado, que escribe por puro placer(tal es mi caso).
Y por otro al escritor profesional, que supuestamente vive de ello.En este segundo caso creo que, se escribe más para un público de lectores determinado, que por el mero placer de escribir.
Creo que una cosa es ajustarse un poquitín (yo tragaría un poco, pero solo un poco en lo de modificar mi obra en aspectos de estilo, que no de contenido), y otra bien distinta es escribir Jarri Putter 2.
Además, ejemplos de bodrios mediáticos: Dan Brown. Menos mal que hace tiempo que no oímos nada de él.
Que no te vengan con milongas, Malube, las editoriales son empresas, y los lectores, a veces, borregos.
Catulo. Claro que estamos hablando de literatura, y lo que digo no es sino un pequeño porcentaje de lo que llevas en la cabeza cuando escribes, pero está ahí (tristemente) y hay que prestarle atención.
Un abrazo
Santi
Vaya, que me voy a dormir y cuando regreso me encuentro con esto.
No voy a responderle a nadie en concreto.
Escribo para solo para mí y disfruto con ello.
Típicas palabras del autor que luego envía y pasa continuamente los manuscritos.
Escribo por que me gusta, como afición (es un juego o entretenimiento para mi).
Y si a ese juego o entretenimiento lingüístico que se plantea le añadimos el juego de llegar a cuanta más gente mejor.
En la literatura, como en tantas otras cosas, no tiene todo porque ser blanco o negro. Existen puntos intermedios.
Yo pienso que en el rol o el juego de escribir, ha de entrar el acercamiento al lector.
Mucho se ha hablado aquí de las limitaciones o falta de personalidad que puede causar esta perspectiva al escritor. Yo digo lo contrario, esto enriquece.
Nada que ver tiene, el que un escritor consagrado quiera o no agradar a sus lectores, figura ya definida, la cual si que puede marcar o condicionar al escritor.
Por otro lado, he leído por aquí algunas cosas sobre autores que "comen" de este arte. Yo os digo que se pueden contar con los dedos. Si tomamos a estos como ejemplo, mal encaminados vamos.
Supongo que me dejare cuestiones sin responder, pero tengo que marcharme.
Cambiando de tema. Quiero saludar al amigo Zambar, que nos hemos encontrado en otros sitios, otras ocasiones.
Zambar; denotas un don especial para hacer amigos entre los editores.
¿Cómo te sentirías si la gente, en vez de valorar tu trabajo te dijera? "lo haces por que te pagan"... No me parece un comentario acertado...
Sí, las editoriales son empresas, ¿has pensado que tipo de empresas son?... ¿Qué haría un pintor sin galerías o sitios donde exponer? ¿Piensas que estamos en pro de la cultura? ¿Crees que nos gusta promover la literatura o aprovecharnos vilmente de ella? ¿Crees que nos dejamos los cuernos por promover la lectura, el arte o las letras? ¿Piensas que únicamente nos movemos por el simple afán de lucrarnos?.
Perdóname, pero veo fuera de lugar este comentario (que personalmente considero despectivo) en este lugar, al igual otro que también he podido leer en otro hilo y que tu escribiste.
Pero cuando escribo poemas siempre pienso en una persona en especial.
Pues claro que escribo para que se me publique, ese es mi objetivo final, por no decir que es el primero..., bien, reconozco que es el primero, aparte de que me lo paso cañón escribiendo.
Soy asesor fiscal por la pasta (si quereis un consejo tributario, pasar por mi despacho y os enteraréis de lo que vale un peine)
Escribo para ganar pasta ¿Que tiene de malo? Tengo familia y tragan como un regimiento... ¿pero no iba de lectores el tema, creo que me he perdido?
En fin, quien desee pertenecer a una ONG, FUNDACION, ASOCIACION NO LUCRATIVA, que destine su 0.7 a otros fines de interés social.
PD
Espero que mi editor se forre con mi novela, porque antes que él, lo haré yo. Así en la próxima edición me lanzará 20.000 ejemplares de golpe, bueno o 1.000.000
A veces soy un puñetero bocazas, pero me reafirmo. A ver, yo tengo excelentes relaciones con una editorial de provincias; esto no me ha servido para publicar con ellos, pues no encajo con su línea editorial, pero sí puedo decir que me han pagado y mucho por hacerles trabajillos.
Lo que quiero decir con esto es que respeto y mendigo como cualquier otro la iniciativa valiente de personas que montan una empresa y nos permiten a nosotros estar ahí.
Eso no quita que pueda tacharles de mercachifles y de no promotores de la cultura cuando imponen un mercado, eso con la connivencia del gran público, que se deja arrastrar como por los Cuarenta Subnormales (en cuanto a música se refiere).
Pero al hilo de este tema, lo que quería decir es que uno debe escribir ante todo y primeramente para sí mismo, y de lo contrario se está prostituyendo, tarea esta que muchas veces nos vemos obligados a ejercer.
Hale, un careto, para que no te me enfades
Veamos Zambar, te he explicado que no es este el lugar para dar valoraciones personales de sobre la labor de las editoriales. Ese sería otro hilo, que podrías abrir tu mismo. Ej. Que pensamos de los editores.
Por otro lado, también te he dado a entender que me he sentido ofendido , pero te da igual. Lo que no se puede consentir es que descalifiques gratuitamente a toda una profesión, y más cuando has demostrado que no conoces ni un ápice de este micromundo.
Sobre el hilo, lo que dices... Ok, Entonces los albañiles, los carpinteros, los informáticos... y el resto del mundo mundial, somos prostitutas, ¿no?... Tienes una forma muy especial de ver las cosas y de infravalorar el trabajo de los demás.
Por cierto... ¿A tu amigo el editor le has comentado lo que piensas sobre los que practican su profesión?
Lo que transmite es la desesperación de muchos que están convencidos de que escriben bien, tal vez erroneamente ya que no todos vamos para Nobel de la literatura por mucho que nos apreciemos, y se encuentran con el rechazo del mundillo editorial (agentes, editores) por escribir algo que no está de moda o es diferente o simplemente porque aunque es bueno, eres nuevo y es un riesgo. A los escritores noveles nos gustaría encontrar esa editorial que hace lo que luego pregona en los periódicos: descubrir talentos y arriesgar, además de publicar a sus vacas sagradas. Por supuesto que es un negocio, y a mucha honra, pero ser empresario siempre ha sido sinónimo de emprendedor, de asumir riesgos, y ahora se percibe una cierta política "amarrategui", que nos cuesta asimilar.
Repito, no te lo tomes a mal. Precisamente vosostros os dedicais a los noveles, con lo cual ya dáis un paso hacia el riesgo, y es normal que lo déis sobre seguro.:o
Pues eso, Falquian, que no sé por qué te has sentido ofendido. En cualquier caso, no estoy de acuerdo contigo en lo del hilo. Aquí se pueden traer a colación temas transversales-relacionados, te guste a ti o no.
Hombre, pues yo no me corto un pelo. Tengo amigos empresarios y sé muy bien que su visión es ligeramente distinta, pero ¿eso es incompatible con lo que he dicho? ¿A ti te parece que el mundo editorial, en líneas generales me refiero, apuesta por la buena literatura?
Sé que todo es subjetivo, pero no me negarás que cuando salió el famoso "Código Da Vinci" comenzaron a salir infinidad de títulos con el apellido o nombre de un filósofo, científico o artista famoso como coletilla al final del mismo (La ecuación Dante, La incógnita Newton y un larguísimo etcétera). Esto, como comprenderás, es puro marketing, que no quita para que las novelas que se venden sean buenas, que las hay; yo no soy en absoluto defensor de la literatura que defienden muchos académicos estirados.
En cualquier caso, te pido disculpas por algo que no sé muy bien qué es, porque mi intención no es ofender al gremio, pero sí es mi opinión, y entiendo las vicisitudes de una empresa editorial, créeme, porque me han informado bien de cómo está el tema (aunque siempre se puede aprender mucho más).
Por cierto, lo de la M, que sepas que no me enfada en absoluto que la gente se equivoque, me lo tomo a coña. Eso sí, como dice Malube, no me fastidiéis demasiado con la regla gramatical, porque mi nick es anglosajón, y que yo sepa todos sabéis escribir muy bien David Beckham, y no escribís Bekan (bueno, algunos seguro que sí, jaja).
Saludos, paz y buen rollo.
Eso es como el que para gustar a una chica se amolda a ella en lugar de mostrarse tal y como es, pero a lo bruto, con mucha mas gente de por medio. Debe ser frustrante y muy triste, la verdad.
Estimado Zanbar;
Puñeteras imposiciones editoriales... Con perdón.
Que no te vengan con milongas, Malube, las editoriales son empresas, y los lectores, a veces, borregos.
Sobre todo en la segunda frase, noto un tono bastante despótico... Así que ahora no te hagas el "yo no se".
En cuanto a temas transversales... Hasta podíamos llegar a analizar el comportamiento de aquel niño norteamericano que el 17 de Noviembre de no se que año, avisto un ovni sobre el cielo de Texas.
Lo que está claro es que el sentido de este foro no va en torno a la relación editor/autor.
Zanbar: ¿A ti te parece que el mundo editorial, en líneas generales me refiero, apuesta por la buena literatura?
Sí, en líneas generales promueven la cultura el arte y las letras.
Ten en cuenta que a veces, para permitirnos ver editado a un autor novel o una gran obra del dieciocho, las editoriales han de crear superventas.
¿Te has parado a pensar qué a lo mejor Lumen (Random) se ha permitido publicar en España lo último de Doris Lessing por que Plaza (Random) ha ganado dinero con “Un mundo sin fin”?
Simplemente, quiero preguntaros si pensáis e intentáis plasmar algo que al sufrido lector le interese, le atraiga y le guste.
Warewolf: Muchas gracias por retomar el tema inicial.
Como he dicho antes, podemos encontrar un punto medio. El hecho de cambiar nuestro estilo, técnica, y un largo etcétera, nos haría esclavos.
No se cuan complicado debe ser para vosotros entender que se pueden hacer ambas cosas al mismo tiempo.
Todavía voy a tener que liarme a morder cuellos... es
...ya sabes...
Puede, aunque para llegar al editor, enmedio hay una figura crucial, el lector profesional, que decide si alguien más te llegará a leer o no. Y ese lector es probable que esté influenciado por los "gustos " editoriales de quien le contrata. Yo te podría copiar frases paradójicas, escritas por esos lectores, que avalan lo que Zanbar dice, del tipo "está muy bien escrita, muy buena, engancha, pero para colocarla en una editorial siendo de un novel es difícil ya que no es una novela de género, histórica, thriller o romántica".
¿Está eso mal? No. ¿Jode (con perdón)? Sí.
Yo esa postura la comprendo, aunque en lo que se refiere a mi obra no lo comparto . Creo que es más comercial de lo que creen, y creo que el lector común, que imagino es de lo que iba este hilo, es más inteligente y menos borrego de lo que muchos piensan (editores y escritores).
Lectores somos todos los que estamos aquí, y leemos best sellers, clásicos, y ese buen libro que nos recomienda un amigo. El problema es que al lector le condicionan con publicidad y distribución. Las tiradas de una buena obra de un novel son de risa, por miedo a que no cuaje y palmen pasta. Mientras que en un consagrado, bueno o malo, o en un famoso (¿qué tal mi amigo Boris?) se gastan fortunas en ejemplares, marketing, distribución... Y al final el lector es lo que encuentra en donde va a comprar.
Si vas ahora mismo al Corte Inglés, verás una mesa de 10m por 3m con todas las obras de Ruiz Zafón, a cientos de ejemplares. Y me parece muy bien. El lecor no es un borrego, pero tampoco es Indiana Jones buscando el libro perdido. Para encontrar el libro de un amigo escritor, al que me lo regaló le costó Dios y ayuda, entre otras cosas porque por suerte para él, en varios sitios estaba agotado. Pero donde si lo había, era como encontrar una aguja en un pajar, y porque preguntó directamente por él. A saber cuantos ejemplares editaron.
Te contesto. Cómo cuando empecé a escribir, no pensaba publicar, lo hice para mí. Pero yo también soy lectora, y no hago ascos a los best sellers. El Ocho es uno de mis libros favoritos. Imagino que lo que te gusta leer te influye a la hora de escribir. El resultado es que, terminado el libro que no iba dirigido a nadie, gusta a muchos. En el que estoy escribiendo ahora, estoy teniendo en cuenta algunas de las observaciones que me han hecho, porque ahora si que tengo conciencia de que quiero publicar. Pero sigo fiel a mi estilo y con el tema que tenía en la cabeza. Yo no lo veo como prostitución, sino como el aprendizaje necesario del oficio de escritor, al que todavía aspiro a llegar.;)
Werewolf, soy algo impresionable, y entre la foto de Marilyn Manson que no consigo quitarme de la cabeza y que está en otro post y el lobo que nos has plantado aquí, no gano para sustos.:eek:
Disculpas generales por el testamento.
http://muchachadanui.rtve.es/videos/enjuto-mojamuto-24.html
saludos
Hay algunas cosas con las que no puedo estar de acuerdo contigo:
- Si alguien abre un post en el que comenta que para quién escribe el escritor, es decir, a quién tiene en cuenta como potencial lector; y Santi ya irrumpe con la estrategia para editar, como comprenderás yo no estoy saliéndome lo más mínimo del tema, en todo caso ahondando más en un aspecto del mismo. No sé por qué tu empecinamiento en limitar el debate en ese aspecto. De antemano te aviso: no tienes ningún derecho, con lo cual, si seguimos hablando de las editoriales, pues no leas los mensajes que vayan referidos a ese tema y ya está.
- Matizo lo de las editoriales. Ellas son empresas; admitamos que tienen parte de responsabilidad en el mercado, en lo que al final sale a la luz como literatura. Pero admitamos también que el público, la cultura que se enseña en las escuelas, la familia y un extenso abanico de influencias son los que van a favorecer que exista una demanda y por tanto una oferta. Las empresas como tales se dedican a su fin último, que es el de ganar dinero. Hasta ahí de acuerdo.
- Eso no implica que yo, tanto como lector como escritor, no pueda quejarme de la pobreza artística, del difícil acceso a la edición, de lo caros que están los libros y otro largo etcétera.
- Y por lo que respecta a este tema: la idea originaria era matizar que uno, cuando escribe, si lo hace solo ateniendo al mercado, está escribiendo para esos lectores. Dentro de esa idea, el escritor que no escribe lo que realmente quiere escribir, que cede demasiado terreno, probablemente esté disfrutando, no lo sé, pero desde luego se está vendiendo.